Mucho Lucho en la comunicación
Hoy en día y hace bastantes años ya que el mundo de las comunicaciones se encuentra saturado.
El colapso comenzó con la publicidad que poco a poco se puso cada vez más invasiva. De igual manera el mensaje fue cada vez menos relevante en su exposición.
Ver hoy una mujer semi desnuda para un comercial de detergentes es habitual. O ahora último, ver una campaña de jóvenes en jarana para una compañía de telecomunicaciones. En lo personal, encuentro que los publicistas se mueven en masa en el mundo de las ideas y son pocas las campañas que aportan valor, que dan sentido a lo que dicen.
El ciclo es el siguiente: más marcas compiten en más canales y por tanto envían más mensajes lo que produce sobrecomunicación que es igual a la pérdida del impacto publicitario.
Es ridículo que las empresas sigan pensando que gastar millonadas en anuncios puede ser mejor o más efectivo que el Marketing de Contenidos por una razón primordial, la segunda forma se relaciona con los consumidores en base a sus intereses, en cambio, la primera se basa en lo que desea la empresa.
El libro Buyology revela lo ineludible: “En 1965, el porcentaje de recordación de spots por parte del consumidor típico era del 34%. En 1990 había descendido al 8%. En 2007, una encuesta de ACNielsen a 1000 consumidores reveló que la persona promedio apenas podía nombrar 2,21 anuncios de los que había visto en su vida”. Potente, por más imputs que coloques las posibilidades de visibilidad por medio de publicidad son casi nulas.
Los contenidos de esta nota son inspirados en el paper de Josep Ma. Abella “6 viajes a la mente a través del Marketing”.
¡Exito!
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